
¿Qué hora es? ¿Tan sólo cinco minutos? El tiempo hoy se resiste a seguir su curso. Esta gente sigue haciendo su examen... Yo no... Yo... No... Yo... Miro por la ventana, la lluvia, el agua, las gotas, la lluvia, el agua, las gotas que se deslizan, la lluvia, el agua que cae, las gotas que se deslizan, la lluvia que pesa, el agua que cae, las gotas que se deslizan.... La lluvia que pesa... La lluvia que pesa en mi mente, gota a gota, sonido a sonido... La lluvia que pesa al pensar... Todo el día lloviendo, cómo me pesa la lluvia... Cómo algo tan pequeño como una gota puede hacer de la tierra el barro, cómo puede hacer de mi ropa más peso que cargar o, incluso, de mí una enfermedad... ¿Cómo algo tan pequeño y frágil? Míralas... Ahí... En el cristal... Bajando poquito a poquito, como si la vida corriera dentro de ellas, dejando ese transparente y reluciente rastro... Cómo una cosa tan pequeña puede guardar tal inmensa belleza... Míralas... Parece que la vida las tiene presas... Siguiendo su camino por ese cristal tan liso... ¿Por qué no es recto el camino? ¿Qué hace que una tenue gota se desvíe en un pulido cristal? Un cristal sin mota de polvo... ¿Por qué no es recto el camino? Igual esto es la vida: Un camino desviado, por no sabemos qué ni quien, que seguimos unas pequeñas gotas transparentes sin poder resistirnos... Igual las personas sólo somo eso, gotas ante algo o alguien que nos vigila en lugar de hacer su examen... Gotas... Si yo fuera una gota... Si soy una gota... Sólo quiero encontrar un lago donde poder ser feliz... ¿El problema? El problema... Todavía estamos a martes.
Llegamos a viernes, juanfran. Y vivos!!
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