domingo, 13 de enero de 2013

Raro, especial, distinto... Como lo quieras llamar.

¿Raro? ¿Qué es algo raro? Tú llamas raro a alguien que es distinto a ti, llamas raro a algo que no habías visto antes, llamas raras a las cosas que no entiendes, pero... ¿Por qué raro? 
Llamas raro a una persona simplemente por que no vista como tú, no hable como tú, no le guste lo que a ti... Pero por esa regla de tres, ¿por qué no eres tú el raro en lugar de él? Tú no vistes como él, no hablas como él y no tienes los mismos gustos que él. 
Cada persona es única de alguna forma, cada uno tiene una forma de ser, una forma de pensar distinta, otra cosa es que nos dejemos llevar por lo común, lo "normal"... Que un mayor número de personas haga algo que nosotros no hacemos no debería ser razón para hacernos cambiar. Cada uno tiene una personalidad que  no puede dejar escapar. Nos tiramos años y años buscando saber quiénes somos y qué es lo que queremos, para acabar encontrando lo que no somos verdaderamente, simplemente por lo que puedan pensar u opinar sobre nosotros los demás. ¿Por qué nos hacemos esto? ¿Por qué destruimos nuestra forma de ser?
Tú mismo te discriminas y te rechazas cuando haces algo que no te gusta simplemente por que lo hagan los demás, ¿de qué te sirve? ¿Para que te acepten socialmente? ¿QUÉ CLASE DE GILIPOLLEZ ES ESA?
Deberías preferir a una sola persona que te quiera por cómo eres antes que cien personas que te vean bien sólo por ser algo que a ti mismo no te gusta, porque esa persona sabe apreciarte de verdad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario